
La zona de Sierra Traviesa forma parte forma parte del primer frente de relieve de Sierra Morena en contacto con la depresión del Guadalquivir. Aunque con anterioridad existen unidades de relieve en forma de montes – isla muy cerca del cauce del río (por ejemplo la zona de los cabezos), la denominada Sierra traviesa constituye la primera elevación clara de Sierra Morena.
Restos de una calera en la cresta de Sierra Traviesa
Los trabajos arqueológicos en la zona de sierra traviesa han sido limitados, dispersos y poco profundos. El acercamiento más claro desde el punto de vista arqueológico, lo tenemos en el trabajo de la arqueóloga tristemente desaparecida Doña. Ana Mª Márquez Alcántara. En su proyecto de prospección arqueológica denominado “Símbolo y Territorio. Arte Rupestre prehistórico en Sierra Morena Cordobesa.”, se estudiaron diversos yacimientos relacionados con cuevas y abrigos de la zona de Sierra Traviesa y la orilla cordobesa del Retortillo. Según este trabajo “la disposición de los abrigos y cuevas en la margen izquierda del río Retortillo, afluente del Guadalquivir, resulta inmejorable, tanto que incluso podríamos definirla de “clásica”: a medio camino entre el Valle del Guadalquivir y el batolito de los Pedroches “.
Afloramientos rupestres de Sierra traviesa
A pesar de que la prospección sobre arte rupestre no dio resultado positivos porque el soporte natural de estas cuevas no permite la pervivencia de expresiones artísticas, si se documentaron distintos útiles y piezas líticas con un amplio espectro temporal desde el paleolítico medio hasta el calcolítico.
Abrigos rocosos de Sierra Traviesa en contacto con el Retortillo
La cueva más importante de todo el entorno está situada en las cercanías de la cantera. Esta cueva tiene muros en la entrada que nos muestran sus antiguos usos como establo o incluso como hogar. Posiblemente esta cueva era utilizada por los pastores que transitaban por la cercana cañada real soriana para guardar sus rebaños. Esta cueva fue topografiada y catalogada en el año 2016 por el espeleologo del G -40 Aben Aljama.
Plano de la cueva de Sierra Traviesa ( Abén Aljama )
Otro acercamiento realizado desde la arqueología a la zona de sierra traviesa es el realizado por Juan Francisco Murillo Redondo. En su artículo publicado en la Revista Ariadna, el Arqueólogo Murillo Redondo señala que existen yacimientos arqueológicos con cultura material calcolítica en la zona de la Higuera y la Vega Vita con materiales como cuencos y vasos globulares. El yacimiento más interesante de esta demarcación geográfica está situado en la demarcación del antiguo cortijo de La Morena a 500 metros del Retortillo y en el Vado de La Gitana lugar de paso de la cañada hasta la Puebla de Los Infantes. En esta demarcación arqueológica aparecen cerámicas calcolíticas con gran amplitud temporal.
Los restos prehistóricos se complementan con los testimonios sobre el dolmen aparecido en las cercanías del cortijo de Las Mezquetillas y que fue destruido en la década de los sesenta del siglo XX. Una cerámica testimonio del ajuar de ese dolmen se conserva en la exposición del Museo Municipal de Palma del Río.
Restos de extracción de piedra de molino
Durante el periodo antiguo aparecen también materiales dispersos en las cercanías del Cortijo de La Morena pero sobre todo en la demarcación de tierras de La Higuera (materiales arqueológicos de época antigua se conservan en la colección Marsal custodiada por la Junta de Andalucía).
En el periodo medieval también está constatado ese asentamiento que estaría en conexión con el enclave fortificado de Hisn Melbal (castillo del Toledillo) en la vertiente oeste del Retortillo.
El camino – senda de la cañada Real Soriana, que ha sido utilizado durante la edad media, ha dejado muestras en el paisaje tan interesantes como la utilización de la cueva de Sierra Traviesa para refugio de pastores y ganado. Además en el cruce de caminos entre la cañada real soriana y su desvío hacía el vado de la Gitana y el camino de la Puebla de los Infantes aparece un manantial para uso humano y ganadero llamado Fuente Blanquilla. En los aledaños aparecen pequeñas canteras que aprovechaban los afloramientos de caliza para extraer sillares en varios puntos del recorrido.
Las referencias documentales de esta zona son múltiples quizás la más interesante desde el punto de vista toponímico es el documento de 1483, del 9 octubre (AMC. AH. 12.04.01. C- 35/ docs. 4 – 35, fols. 8r – 23v), publicado por el profesor José Luis del Pino4, sobre “El traslado realizado, con autorización judicial, en 1483. Contiene básicamente 34 sentencias dadas por el licenciado Diego de Rojas, juez de términos de la ciudad y obispado de Córdoba, durante los años 1477 y 1478.” En este documento aparece una mención a la cañada real “ fasta el camino viejo se falló e porvó ser valdio e verde e dehesa e pasto común e descansadero de ganados desde el dicho camyno viejo que desciende a Guadalora al vado del Molar que se diyce de las Mesquetillas donde es la vadera dejolo e mando que sea baldy e verde e dehesa e pasto commun de todos e descansadero de ganados e mando que desde el dicho camino viejo e vado subiendo río arriba desde el cendajo que es en lo de Juan Gil fasta lo de Sant Sevastian que quede por verde e vadera de todos pudiendo labril el dicho Juan Gil lo árboles de dicho çendajo abajo hasta el río llevar el fruto de ellos…. “.
En este documento además aparece el nombre de un propietario de tierras en esta zona que puede ser el origen del toponino de Sierra Traviesa ; “ E porque se falló e provó que desde el olivar de Benyto Ferrándes abaxo por el çelajo que es realengo e pasto commun dexolo e mando que sea realengo e pasto commun e mando faser e fisose un mojón en el dicho çelajo fasta dar en la dicha verde e porque desde el çelajo que junta con lo del obispo e con los heredero de Juan Trauyeso “….
Este propietario llamado Juan Trauyeso o travieso, que en la baja Edad Media tenía tierras en esta zona pudo dar nombre a Sierra Traviesa. Durante la Edad Moderna toda la zona fue transformada en hazas para el cultivo de la vid, existiendo varios lagares. Del año 1645 se conserva en el Archivo Municipal de Hornachuelos (caja 1158) un libro de los lagares de Sierra Traviesa y Mezquetillas. Memoria de estos lagares queda en la primera edición del mapa topográfico con los topónimos de Lagar de la escribana y lagar gallego.
Un artículo de Emilio J. Navarro Martínez