Desde distintas asociaciones implicadas en la conservación de los recursos naturales y patrimoniales de nuestra comarca, queremos comunicar para su máxima difusión el lamentable estado en el que se encuentra el Río Guadalora, desde su nacimiento en el Parque Natural de Hornachuelos, hasta su desembocadura en el Río Bembezar.
Foto del cauce cerca de la pasada de las Algeciras
Este río forma un cañón natural en parte de su curso que lo hace especialmente único al mantener todo el año una flora y fauna de ribera difícil de encontrar por estas latitudes, especialmente en las épocas veraniegas. Así mismo, sirve de abrevadero para muchas especies de animales salvajes y para el ganado vacuno y caprino . Este ganado doméstico también realiza las inigualables tareas de limpieza del bosque mediterráneo, imprescindibles para dificultar la propagación de incendios.
El río Guadalora ha servido desde tiempos inmemoriales para el uso y disfrute de los vecinos de la comarca, especialmente de los habitantes de Hornachuelos y Palma del Río. Durante el verano era un lugar frecuente de baños y en el invierno para pasear, recolectar espárragos o setas. Desde hace años cuenta con un sendero, denominado con el mismo nombre que el río, que pasa por ser el más visitado del Parque Natural de Hornachuelos, y que recibe visitantes de toda Andalucía.
Foto del cauce en el molino de la Paloma
Actualmente, habiendo sido este un año pluviométricamente hablando que se puede considerar normal, el curso del río no cuenta con agua en ninguno de sus tramos. La principal razón de esta sequía, es que desde hace años se producen extracciones de agua desde el mismo curso alto del río, para el riego de olivares de crecimiento intensivo. Esta forma de explotación agrícola de gran impacto medioambiental, requiere un gran consumo de agua. Los sistemas de regadío que se han implantado aprovechan los recursos fluviales del río, para regar la explotaciones particulares, lo que supone una privatización del uso público del agua. Las consecuencias de esta desecación se pueden observar en la degradación del antaño frondoso bosque de ribera. Lo que antiguamente era un río con gran cantidad de fauna acuática, hoy agoniza por la falta del principal elemento que la sustenta, que no es otro que el agua.
Extracciones de agua en el cauce del Guadalora
En los últimos meses, algunos ciudadanos y colectivos comprometidos con la defensa de la naturaleza han interpuesto las correspondientes denuncias a las autoridades pertinentes. Mediante esta nota de prensa queremos dar a conocer esta realidad, para una mayor difusión de este flagrante atropello a la naturaleza que está desecando una de las principales reservas naturales fluviales de Andalucía.
Juan Antonio León Zamora. Presidente del Club Deportivo Palma Patina. Palma del Río
Emilio J. Navarro Martínez. Presidente de la Asociación Saxoferreo para la Defensa del Patrimonio Cultural. Palma del Río.
José Cano. Presidente C.D. Ambassar. Hornachuelos.
Aben Aljama Martínez. Presidente Grupo Espeleológico Kart-Oba. Córdoba.
Carlos Jurado Carmona. Presidente del Club de Senderistas de Peñaflor.
Luisa Venteo Díaz. Presidenta del Grupo de Acción Medioambiental, GRAMA. Palma del Río.
Antonio Martínez Martínez. Presidente del C.D MTB Los Quemaos. Palma del Río.
María Rosa Elías Rosa. Tesorera del Grupo de Acción Medioambiental, GRAMA. Palma del Río.
Gloria López Almeida. Secretaria del Grupo de Acción Medioambiental, GRAMA. Palma del Río.
Jesús Vaquero Encuentra. Vocal del Grupo de Acción Medioambiental, GRAMA. Palma del Río.
Cristina Vaquero Venteo. Vicepresidenta del Grupo de Acción Medioambiental, GRAMA. Palma del Río.
Tatiana Campanario Moreno. Vocal del Grupo de Acción Medioambiental, GRAMA. Palma del Río.
Francisco Moles Contreras. Vocal del Grupo de Acción Medioambiental, GRAMA. Palma del Río.
Jara Aliaga Palmero. Miembro del Grupo de Acción Medioambiental, GRAMA. Palma del Río.