Reseña de «¿Quién quiso la Guerra Civil? Historia de una conspiración», de Ángel Viñas (Crítica, 2019)
Hace unos días me sorprendí al estar de acuerdo con algo declarado por la Fundación Francisco Franco respecto a la exhumación de sus restos del Valle de los Caídos: humillar a los muertos es de cobardes. No dejan de hacerlo quienes faltan a la verdad y quienes aún sabiéndola, se niegan a condenar una de las dictaduras más brutales de la historia del presente. A la contra pelean libros como este.
La legitimación que la dictadura franquista hizo de sí misma desde la Guerra Civil no difiere mucho de lo que sostienen muchos políticos del espectro de las derechas, algunos tertulianos y algunos que pasan por historiadores entre el público más meapilas. Leyendas como la ilegalidad de la Segunda República, sobre su carácter “revolucionario”, sobre la agresión que continuamente sufrieron la Iglesia, los militares y los terratenientes, su ataque a la unidad de la Patria, el peligro del comunismo… y con el tiempo, la construcción de la figura de Franco como un “hombre bueno”, son hoy del todo insostenibles desde un punto de vista historiográfico. Siendo la Guerra Civil y la Posguerra uno de los momentos de la historia española más estudiados, comenzando por un férreo trabajo de archivo y de historia local, aún sin embargo por hacer en gran medida, contrasta el caudal de conocimiento que ya existe sobre el mismo con la ignorancia o la mala intención que destilan algunos sectores de la sociedad española cuando pontifican sobre nuestro pasado más duro.
Trabajos como los del Ángel Viñas han contribuido enormemente a desmentir la patochada historiográfica del revisionismo franquista, y desdicen continuamente a lo que algunos políticos, que se dan golpes en el pecho presumiendo de demócratas y constitucionalistas, siguen afirmando cuando se reivindica la verdad, la justicia y la reparación para las víctimas de la dictadura militar española. Así, por citar libros inmediatamente anteriores a este que aquí reseñamos, en La otra cara del Caudillo (2015), Sobornos (2016) y El primer asesinato de Franco (con Miguel Ull y Cecilio Yusta, 2018), demostró el carácter extraordinariamente corrupto del “Caudillo” y su familia, fiel reflejo de la España que acabó por consolidar.
En esta obra que aquí reseñamos brevemente, Viñas amplía conocimiento y reflexión, en base a su habitual trabajo sobre fuentes directas de archivos nacionales e internacionales, lo demostrado ya en obras colectivas como Los mitos del 18 de julio (2013) y La conspiración del general Franco (2011) y que algunos hemos afirmado desde otros ángulos: el golpe militar que dio lugar a la Guerra Civil fue algo buscado con intensidad por un sector de la sociedad española, compuesto por derechistas monárquicos, aristócratas, algunos banqueros y militares -especialmente del grupo africanista- desde el nacimiento del primer intento de democracia moderna en España. Ni fue un efecto de la República, ni una intervención “salvadora” del comunismo, sino un golpe de clase que buscaba el mantenimiento de los privilegios de su añorado Antiguo Régimen. Otra cosa es que jóvenes fascistas, las clases medias rurales, el catolicismo social o los carlistas se uniesen al mismo.
La principal aportación para demostrar tal afirmación que Viñas aporta en este libro, y que sirve de hilo conductor al mismo, fue el pronto establecimiento de relaciones con la Italia fascista de Mussolini por parte de aquel sector monárquico que, organizado en círculos como Acción Española y en partidos como Renovación Española, conspiró contra la República desde primera hora. Así, tomando por base archivos italianos, el autor muestra el interés del fascismo, en plena carrera imperialista durante los años treinta, de establecer en España un gobierno afín. Para ello y con el dinero de banqueros de reconocida trayectoria conspiradora como Juan March, se compraron armas, municiones, transportes, aviones, etc. meses antes del golpe del 18 de julio, el cual nunca fue una respuesta al asesinato de Calvo Sotelo, como hay quien sigue creyendo. Así, el libro va trazando, con un texto ameno y preñado de sugerencias, los pasos que desde ambos lados se fueron dando para el establecimiento de unas relaciones que fueron decisivas en la posterior victoria de Franco en la contienda, poniendo de relieve quienes fueron los principales personajes políticos, civiles y militares volcados en la conspiración militar de la que después, una vez ganada la guerra, intentarían reclamar sus méritos.
Por lo tanto, estamos ante una lectura imprescindible para quien desee profundizar, partiendo de un material documental muy valioso -en los anexos se incluyen los contratos de las compras señaladas…-, en el conocimiento de las causas reales de la Guerra Civil española.
Álvaro Castro Sánchez